San Juan María Bautista Vianney, naciste de una madre profundamente religiosa; de ella recibiste la Santa Fe; aprendiste a amar a Dios y a orar. A una edad temprana, se le vio arrodillado frente a la estatua de María. Tu alma fue llevada sobrenaturalmente hacia las cosas de lo Alto. A pesar del alto costo, ¡respondiste a tu vocación!
Contra muchos obstáculos y contradicciones, tuviste que luchar y sufrir para convertirte en el perfecto sacerdote que eras. Pero su profundo espíritu de fe lo apoyó en todas estas batallas. Oh Gran Santo, conoces el deseo de mi alma; Me gustaría servir mejor a Dios; de Él he recibido tantas cosas buenas. Para ello, consígueme más coraje y sobre todo profundidad de fe.
Muchos de mis pensamientos, palabras y acciones son inútiles para mi santificación y para mi salvación, porque este espíritu sobrenatural no agita mi vida. Ayúdame a ser mejor en el futuro.
Santo cura de Ars, tengo confianza en tu intercesión. Reza por mí durante esta novena especialmente por ... (menciona en silencio tus intenciones especiales).
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